Cerca de 15 días separan a los ciudadanos de las próximas elecciones. En la investigación, los marplatenses expresan sus preocupaciones sobre los temas de agenda del próximo gobierno, sus percepciones sobre la actual campaña y caracterizan su comportamiento electoral.
En el contexto previo a las elecciones en las que los ciudadanos argentinos elegirán representantes en los distintos niveles de gobierno, el Observatorio de la ciudad de la Universidad FASTA se propuso caracterizar el perfil del votante a un mes de las elecciones generales 2015. Para ello, se trabajó en función de objetivos tales como: precisar cuáles son los temas considerados prioritarios y que, por tal razón, debieran estar presentes en la agenda del próximo gobierno; determinar cuáles son las expectativas en relación a ciertas temáticas de gobierno; precisar los atributos que debiera tener un gobernante; caracterizar el proceso de la toma de decisión respecto a quién vota en relación a: cuánto comparte el proceso, qué tiene en cuenta, cómo percibe la campaña actual; qué tiene en cuenta a la hora de tomar la decisión.
Perfil de la muestra
La población objeto de estudio fue la constituida por los ciudadanos residentes en la ciudad de Mar del Plata para quienes rige la obligatoriedad del voto, esto es, las ciudadanos incluidos en el segmento de edad entre 18 y 70 años. Se trabajó con una muestra por cuotas según sexo, edad y lugar de residencia conformada por 488 personas.
Expectativas acerca de la agenda del próximo gobierno
En relación a las temáticas que más preocupan y que por esa razón son consideradas como aquéllas que deben estar presentes en la agenda hay coincidencia en mencionar la seguridad, la economía, la educación y la salud. En el nivel municipal se incrementa el porcentaje de quienes mencionan la desocupación y, también, incluyen obras públicas.
La encuesta solicitó especificación en relación a qué espera del próximo gobierno respecto de la seguridad, educación, salud, economía y política exterior.
En seguridad, la expectativa es superar la situación de inseguridad y para esto se esperan cambios en la policía: más presencia policial, más entrenamiento y capacitación, cumplimiento de su trabajo, más controles a la policía para evitar su corrupción. Como también cambios en relación a las leyes y la administración de justicia: necesidad de cambiar algunas leyes, reforzar las penas, cumplimiento completo de las condenas, bajar edad de imputabilidad, justicia eficiente, independiente y no corrupta.
En educación, las demandas se orientan hacia tres aspectos: infraestructura (mejora de edificios básicamente); calidad (mejorar planes de estudio, más exigencias, capacitación de docentes); profundizar, reforzar los valores. Mejora en la situación docente, no sólo económica sino también en el respaldo y respeto. Además, se mencionan: cumplir días de cursada, incentivos para estudiar, promover el compromiso en estudiantes, actualización recambio de docentes, que los docentes cumplan con su trabajo beneficios para graduados universitarios, fomentar la cultura del estudio y del trabajo.
En salud, se espera garantizar la accesibilidad al servicio de salud y mejorar su calidad. Para ello se propone más inversión en salud orientada a más y mejor equipamiento, restauración y mantenimiento de edificios, higiene, multiplicar los centros de atención, mejorar la distribución de los recursos y organizar en forma eficiente, mejorar la atención y los servicios. Profundizar las políticas de prevención, alimentarias, de vacunación.
En materia de economía, la expectativa fundamental está en la reducción de la inflación y de algunos impuestos, políticas de inversión generadoras de trabajo, mejorar sueldos en forma equitativa y de acuerdo con la inflación real. Otras respuestas se refieren a disminuir la corrupción, necesidad de controlar el gasto público, eliminar el cepo, aumentar jubilaciones y pensiones, eliminación de planes y fomento del trabajo, favorecer la industria nacional y promover el crecimiento regional.
En política exterior, mejorar relaciones exteriores, favorecer el comercio exterior, atraer inversiones, evaluar primero y luego tomar decisiones estables en política exterior (revisar acuerdos y relaciones con China, Rusia, Venezuela, con EEUU), proyectarnos al exterior como país creíble. Vale aclarar que en relación a la consulta sobre expectativas en política exterior el 62% de los encuestados no responde o manifiesta no saber.
Expectativas acerca de las cualidades de un gobernante
Acerca de los atributos que consideran deben tener los mandatarios, la honestidad es la virtud o cualidad más mencionada. En forma aislada luego le siguen otras como incorruptible, honrado, buena persona, entre otras. Ahora bien, 4 de cada 10 encuestados considera que ninguno de los candidatos tienen esas cualidades mientras que casi 6 de cada 10 creen que algunos si las poseen.
Perfil del elector
Acerca del proceso de decisión
La mayoría de los encuestados (60%) expresa que el proceso de toma de decisión es compartido con otros, en el sentido de que están abiertos al diálogo, a escuchar las propuestas, confrontar opiniones. Reconocen a la familia como el espacio en el cual más se dialoga y participa y también al grupo de amigos. En cambio, el 40% restante reconoce hacerlo en soledad.
Valoración de la campaña
La mayoría selecciona atributos negativos para calificar la campaña electoral actual como sucia, poco seria, con pocas propuestas y poco creíbles, poco inteligente, sin debate. Coinciden en afirmar que al votante cada vez le importa más el candidato que el partido y su ideología.
Independientemente de la caracterización de la campaña actual, la mayoría estima que el objetivo de las campañas es exponer propuestas, informar para que los electores puedan evaluar y decidir. También consideran que hay una disminución de la fidelidad política en la medida que aumenta el voto volátil.
Percepción de su nivel de información
De acuerdo a los datos extraídos, la mitad de los encuestados manifestó que según su criterio, al momento de votar en las PASO no se encontraba suficientemente informado. Al momento de realizar esta encuesta, un mes antes de las elecciones, el 68% dice que está igualmente informado que al momento de las PASO; sólo el 26% estima que se encuentra más informado.
Percepción de su comportamiento electoral
Finalmente la encuesta propuso una serie de afirmaciones con las cuales los encuestados debían indicar si en ellas veían o no reflejado su comportamiento electoral actual. Se advierte que 9 de 10 encuestados dice votar en función de las propuestas y también evaluando la credibilidad y honestidad del candidato. En caso de no atribuir estas cualidades a los candidatos se opta por el que genera menos incertidumbre o temor, por quien es considerado el menos malo. Si bien un alto porcentaje expresa que vota pensando en su situación e intereses, un porcentaje mayor evalúa riesgos y beneficios de la decisión pensando en el país. Que existe un partido o un candidato al que jamás votaría es una afirmación con la que se identificaron 7 de cada 10 encuestados.
Sólo una minoría, al momento de la encuesta, manifiesta estar indeciso. Es muy interesante destacar que si el voto no fuera obligatorio, aun así votaría.