El Observatorio de la ciudad de la Universidad FASTA publicó su nuevo trabajo denominado “Credibilidad, confianza y sociedad” con el fin de conocer la percepción de los marplatenses, en términos de credibilidad y confianza, respecto a distintos actores sociales, sean instituciones o grupos sociales.
Para una correcta interpretación de la investigación, es necesario destacar, por un lado que la confianza y la credibilidad implican una evaluación personal y, naturalmente, intervienen expectativas, valores, preferencias; lo que significa que se trata de un proceso subjetivo. Por otro lado, es también importante tener presente que no son atributos estáticos que se otorgan una vez y para siempre sino, más bien, constituyen un proceso en el que intervienen dos realidades dinámicas: el sujeto y aquello acerca de lo cual se predica, por lo tanto, cambian a través del tiempo.
Participaron de la muestra 501 residentes en la ciudad de Mar del Plata mayores de 18 años. El perfil de la muestra se caracteriza por una distribución equitativa según sexo, con un nivel de educación mayoritariamente con secundario completo o más y ocupaciones diversas.
Para el estudio se plantearon como objetivos específicos: conocer la percepción de los encuestados respecto a la situación general del país; indagar la creencia en las posibilidades de cambio de la situación actual e identificar las razones; conocer el grado de confianza respecto de diversas instituciones; identificar actores sociales a los que reconoce por su aporte positivo al bien social; identificar su apreciación en relación a la presencia o ausencia de ciertos valores. Finalmente conocer la evaluación del nuevo gobierno y la confianza en el presidente.
Calificación de la situación general del país
Desde una perspectiva general, la mitad de la muestra califica la situación del país como regular, el 36% estima que la situación es mala y sólo una minoría, considera que es satisfactoria. Comparando estos resultados con el estudio del año pasado, se advierte que la valoración continúa siendo no satisfactoria, a pesar de que los datos expresan que fue más alta la calificación negativa en 2015 (47%) que en 2016 (35,7%).
En relación a la opinión respecto de la situación en los próximos años un amplio porcentaje (44%) confía en que mejorará, mientras que el 36% cree que se mantendrá igual y 2 de cada 10 piensan que empeorará. En este aspecto, se observa el incremento de la expectativa de mejora con respecto a 2015, donde el 23% de los encuestados habían indicado la consideración de mejora, en tanto que el 57% percibía que la situación iba a continuar igual. La proporción de personas que consideran que la situación va a empeorar continúa siendo la misma en ambos estudios. La expectativa respecto al cambio no tiene relación con la edad de los encuestados.
Las razones en los cuales fundan su percepción de mejoría aluden al cambio de gobierno, sus características y al acuerdo con las medidas que se están tomando. En tanto motivos por los cuales se cree que la situación empeorará se basan el desacuerdo con las decisiones en general y principalmente con las vinculadas a la economía, y a la inflación. En tanto, quienes consideran que la situación va a seguir igual, principalmente indican que los cambios serán visibles pero no en el corto plazo.
Confianza y credibilidad en instituciones
Respecto de la confianza o credibilidad en diversas instituciones y actores sociales, las respuestas obtenidas indican que el mayor grado de confianza promedio está depositado en la familia y los amigos. Luego se destacan las instituciones educativas y las de salud, y después las ONG, los clubes, compañeros y vecinos. Con calificación menor a 4 puntos se incluyen el gobierno provincial y los medios de comunicación; luego el gobierno nacional, la policía, el Congreso y el gobierno municipal, la Iglesia y las redes sociales. La menor confianza la generan militares, políticos en general, jueces y sindicatos.
Entre las instituciones, profesiones o grupos destacados especialmente, teniendo en cuenta el aporte positivo que realizan al logro del bien social mencionan las ONG y se nombran específicamente a CONIN, Cáritas, Hazmereir, APAND, organizaciones solidarias, REMAR, FUNDAMI, Asociación protectora de animales, Missing Children. Incluidos en instituciones y profesionales de la salud con un porcentaje de mención que vale subrayar (5,6%) se encuentran los Médicos sin Fronteras. Lo mismo sucede con las instituciones educativas y la mención especial de los docentes en general y maestros en particular.
Los valores
Por otra parte, 7 de cada 10 encuestados manifiestan que el valor que más se ha perdido es el respeto; con mucha diferencia hay coincidencias en la mención de la honestidad, la educación, la solidaridad, el valor del trabajo, la responsabilidad y la confianza. Como contrapartida, se propone cultivar precisamente los valores ya mencionados por considerarlos imprescindibles en la vida social. Respeto, educación, honestidad, solidaridad y valor del trabajo son los que obtienen mayor porcentaje en la mención.
«Vivimos en una sociedad en la que se juzga al otro superficialmente»
Propuestas una serie de afirmaciones con el fin de conocer el acuerdo con sus contenidos, se destaca con el mayor porcentaje de acuerdo la que expresa: “vivimos en una sociedad en la que se juzga al otro superficialmente” (94,6%), seguida por “la corrupción no está asociada a la política solamente” (94,2%); “conozco personas que viven aparentando lo que no son” (88%); “nuestra sociedad hoy vive una profunda crisis” (86,20%), por nombrar algunas. Mientras que, las frases que menor porcentaje de acuerdo obtuvieron fueron: “la política como actividad es bien vista en nuestro país hoy” (12,9%); “nuestra sociedad es moralmente sana” (13,1%) y “alguna vez pagué una coima” (14,6%), entre otras.
Confianza en el Presidente actual y Evaluación de los cambios generados por el gobierno actual
El 60% califica de modo positivo su confianza en el presidente mientras que el 28% lo hace mediante opciones que indican bajo o nulo nivel; el 12% restante opta por una categoría intermedia.
En tanto, los encuestados reconocen que hay cambios a partir del nuevo Gobierno, a nivel nacional y municipal, tanto positivos como negativos. Entre los cambios positivos, a nivel nacional se identificaron: una economía sin cepo cambiario; el cambio en la política y relaciones internacionales; la comunicación entre gobierno y ciudadanos; transparencia, menos corrupción; cambio en la política económica. En el nivel municipal, se refieren al poco tiempo transcurrido que no permite tener una opinión formada. Las respuestas de cambios positivos obtienen un considerable nivel de dispersión, pudiendo destacarse las referencias a la transparencia y austeridad.
Respecto de aquellos aspectos en los cuales reconocen que hay cambios negativos a partir del nuevo Gobierno, a nivel nacional, la mayoría de quienes responden menciona la inflación, le siguen: los despidos, el enriquecimiento de algunos grupos, los ajustes y reajustes. A nivel local, las mayores menciones se dan en referencia al aumento de boleto de transporte público y en la falta de arreglo de las calles. El resto de las respuestas, muy dispersas, se refieren por un lado a la desocupación y al aumento de precios y, por otro lado a la falta de equipo en este nivel de gobierno, las frecuentes renuncias de funcionarios, la lentitud en la toma de decisiones, el excesivo silencio o falta de comunicación, entre otras.
Comparando los datos con el año pasado
Respecto del estudio 2015 resulta que en relación a la situación general del país: la valoración general continúa siendo insatisfactoria para la mayoría; disminuye la valoración positiva en dos puntos y la mayor concentración se da en la categoría regular disminuyendo la calificación negativa respecto del 2015.
Se observa un incremento de la expectativa de mejora en 21% con respecto a 2015, donde sólo el 23% de los encuestados la estimaba posible, en tanto que el 57% percibía que la situación iba a continuar igual. La proporción de personas que consideran que la situación va a empeorar continúa siendo la misma en ambos estudios.
En relación a los fundamentos se detectan diferencias sobre todo en el estilo de las expresiones. En 2015 prevalecían expresiones con tono negativo o voluntarista, en cambio en este estudio hay posiciones bien diferenciadas.
No se observan diferencias en relación a la atribución de confianza en actores e instituciones.
Aumenta en un 17% el grado promedio de acuerdo con las expresiones: “En la sociedad argentina hoy hay acuerdos en relación a las políticas a seguir respecto de temas como: salud, educación, economía, etc.” y “La clase dirigente ha logrado acuerdos en relación a temas fundamentales para lograr políticas estables”. Este incremento no significa que se haya logrado respecto de este tema un alto grado de acuerdo. En cambio si se da éste en relación a “La crisis comienza en las familias”.